200 Colombianos residentes en Japón regresarán al país en un avión Boeing 767 de la Fuerza Aérea Colombiana
Con más de 40 horas de vuelo en un avión de la Fuerza Aérea Colombiana, el Gobierno Nacional traerá a 200 colombianos que aun no han podido salir de Japón por las difíciles condiciones en las que se encuentran, luego del fuerte terremoto de 8.9 grados en la escala de Richter y el devastador tsunami que azotó la costa pacífica de este país, el pasado viernes 11 de Marzo de 2011.
El avión tipo Boeing KC-767 “Júpiter” de fabricación estadounidense, el de mayor capacidad de carga y pasajeros con que cuenta la Fuerza Aérea Colombiana y que fue recientemente adquirido, partirá desde el Comando Aéreo de Transporte Militar CATAM en Bogotá, el próximo sábado 19 de marzo de 2011 en horas de la mañana, llevando a bordo 02 tripulaciones altamente calificadas y entrenadas compuestas por 02 pilotos, 02 copilotos, 04 técnicos de vuelo, 04 maestros de carga y 04 auxiliares de vuelo, así como un médico y un enfermero, quienes tendrán la responsabilidad de traer a los connacionales en las mejores condiciones a su país de origen, luego de la crítica situación que se vive en estos momentos en el país nipón, ante el inminente problema nuclear desatado luego del terremoto y posterior tsunami que hasta el momento deja miles de muertos , miles de desaparecidos y miles de damnificados.
Este vuelo transoceánico tendrá como punto de partida el Comando aéreo de Transporte Militar CATAM en Bogotá, y se reabastecerá en el Comando Aéreo de Combate No. 3 ubicado en Malambo en el departamento del Atlántico al norte de Colombia, desde donde partirá hasta la ciudad de Seattle al noroeste de los Estados Unidos de América, para luego volar hasta Japón y aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Tokio, también conocido comúnmente como Aeropuerto de Haneda en donde recogerán a los colombianos. La Fuerza Aérea Colombiana, continuará apoyando con su presencia en momentos de calamidad, prestando ayuda y bienestar a todos los colombianos sin importar el lugar en donde se encuentren, a la espera de satisfacer las necesidades básicas.