Colombia intercepta semisumergibles tripulados

En la primera mitad de agosto de 2018, la Armada Nacional de Colombia logró localizar e interceptar dos semisumergibles tripulados mediante tareas de interdicción marítimas en el Pacífico colombiano. El hallazgo sumó más de dos toneladas de drogas con un valor de más de USD 66 millones en el mercado internacional. Unidades de la Fuerza Naval del Pacífico de la Armada Nacional de Colombia interceptaron el primer semisumergible el 1.º de agosto. Los oficiales hallaron 38 bultos con 748 kilógramos de cocaína y cuatro tripulantes de nacionalidad colombiana a bordo de una embarcación ubicada cerca de la isla Gorgona, a unos 35 kilómetros de la costa del departamento del Cauca. Mediante información suministrada por inteligencia de la Armada Nacional y con el apoyo de un avión de reconocimiento Cessna Citation SR-560 Tracker de la Fuerza Aérea Colombiana, una unidad de reacción rápida de la Fuerza Naval del Pacífico llegó al lugar. Según destacó la Armada, el semisumergible que flotaba a la deriva había sufrido fallas mecánicas durante su navegación hacia Centroamérica. “El semisumergible tenía los motores dañados, lo que no les permitió mantener una inercia”, dijo a Diálogo el Contralmirante de la Armada Nacional de Colombia Orlando Grisales, comandante de la Fuerza de Tarea Contra el Narcotráfico Poseidón de la Fuerza Naval del Pacífico. “Tenía una entrada de agua en el sector donde están los controles y el mando. Se inundó poco a poco la bodega, ganó más peso todavía y se produjo el hundimiento”. Interdicción en alta mar Dos semanas después, unidades de la Fuerza Naval del Pacífico interceptaron un semisumergible tras operaciones de vigilancia y control marítimo en alta mar a más de 500 km al oeste de la costa del departamento de Valle del Cauca. Las autoridades detuvieron a tres tripulantes colombianos y decomisaron 1722 kg de clorhidrato de cocaína. “El 15 de agosto se recibe una información de inteligencia de una posible embarcación que se encontraba navegando por el sector de isla Malpelo”, dijo a Diálogo el Capitán de Corbeta de la Armada Nacional de Colombia Carlos Andrés Torres Caraballo, supervisor de Operaciones de la Fuerza Naval del Pacífico. “Se procede a ordenar el buque [patrullero ARC 7 de Agosto] a desplazarse al área general de Malpelo para utilizar nuestros elementos de última tecnología”. Con el uso de un radar de largo alcance y del vehículo aéreo no tripulado ScanEagle que sobrevoló el aérea, las unidades navales encontraron e interceptaron el semisumergible. Al realizar la inspección del artefacto de construcción artesanal de 12 metros de largo y tres metros de ancho, las autoridades establecieron que presentaba fallas mecánicas en sus motores y una entrada de agua. “Se procede a abrir la embarcación, sacar a los tres sujetos y conducirlos al buque para prestarles los primeros auxilios con el enfermero a bordo”, explicó el Cap. de Corb. Torres. A bordo del artefacto se hallaron 60 bultos que contenían la droga. Cuando los oficiales intentaron llevar el semisumergible hacia el Puerto de Buenaventura del departamento de Valle del Cauca, el artefacto naufragó. En ambos operativos las drogas fueron puesta a disposición de la Dirección de Antinarcóticos de la Policía Nacional de Colombia. Los cinco capturados responderán por los delitos de tráfico y porte de estupefacientes, así como de construcción y uso de semisumergible. Duro golpe al narco En lo que va de 2018, la Armada incautó 14 embarcaciones tipo semisumergible en el Pacífico colombiano, sumando 111 semisumergibles decomisados en más de 20 años. El primer artefacto fue encontrado en 1993 en la isla de Providencia en el Caribe colombiano. Los decomisos representan un duro golpe a las finanzas de las organizaciones narcotraficantes ya que se invierte más de USD 1 millón para la fabricación de un semisumergible. En lo corrido de 2018, la Fuerza Naval del Pacífico incautó más de 59 toneladas de cocaína con un valor de más de USD 1 millardo. Asimismo, debilitó las estructuras logísticas de las organizaciones criminales transnacionales con la captura de 115 personas dedicadas al narcotráfico. El Contralmte. Grisales explicó que el decomiso de drogas trasladadas por vías marítimas afecta los ingresos de las estructuras del narcotráfico según el lugar donde se encuentran. “Un kilo de clorhidrato de cocaína en la línea de costa puede valer alrededor de USD 5000. A medida que se aleja de la costa y se acerca al puerto de destino, aumenta su precio”, destacó. “Su valor en Centroamérica puede ser de USD 15 000 por kilo, que en el mercado internacional puede alcanzar los USD 33 000”. Los narcosubmarinos han ido evolucionando desde su creación. Los buques rudimentarios sin motores jalados por botes de pesca de la década de 1990 se transformaron en embarcaciones autopropulsadas y aerodinámicas con capacidad de viajar largas distancias. Si bien el número de decomisos para 2018 es prometedor comparado a los cuatro de 2017, la lucha contra el transporte marítimo de drogas debe continuar, afirmó el Contralmte. Grisales. “Los narcotraficantes no se han quedado quietos. Han ocurrido una cantidad de eventos alrededor de esta tendencia de tratar de crear medios menos visibles en alta mar”, concluyó el oficial. “Han hecho muchas pruebas, no solo aquí en Colombia sino en el mundo”. Tomado de: https://dialogo-americas.com/es/articles/colombia-intercepts-manned-sem…