Contundencia operacional y responsabilidad social en el suroccidente del país
El Comando Aéreo de Combate No.7 de su Fuerza Aérea Colombiana es la unidad más joven de la Institución, pero una de las más destacadas por la contundencia en el desarrollo de operaciones en su área de responsabilidad, que comprende los departamentos del Valle del Cauca, Cauca y Nariño.
Durante sus 9 años de trayectoria ha trabajado de la mano con las demás Fuerzas Militares, la Policía, la Fiscalía General de la Nación y entidades del Estado, apuntándole al cumplimiento de los objetivos estratégicos del sector defensa, en una de las áreas más afectadas por el conflicto armado y diferentes factores de inestabilidad.
En lo corrido de 2022 ha realizado mil 165 misiones, con mil 338 horas de vuelo:
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Misiones de transporte de personal han permitido movilizar mil 724 pasajeros, además 55 mil 624 kilogramos de carga.
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Con el empleo de sus capacidades distintivas, se han llevado a cabo traslados y evacuaciones aeromédicas de 142 personas, entre ellas una mujer en embarazo de alto riesgo.
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Mediante vuelos de reconocimiento y vigilancia realizados por helicópteros Black Hawk, aeronaves AC-47 Fantasma, Caravan C-208 y A-29 Supertucano, se custodian las ciudades y vías más transitadas de esta región del país. Más de 600 horas de vuelo en 514 de misiones de este tipo, han fortalecido la seguridad y la alerta ante cualquier situación que altere la tranquilidad o el orden público.
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El éxito operacional en materia de seguridad, apunta a desestabilizar los grupos armados organizados, evitando la cadena del narcotráfico y todos sus generadores de violencia, logrando la ubicación de 4 laboratorios de producción de clorhidrato de cocaína y la incautación de más de 19 toneladas de estupefacientes.
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El trabajo por la preservación del medio ambiente, ha sido uno de los pilares fundamentales para continuar generando acciones en el cuidado de los recursos naturales, para ello se han llevado a cabo 12 operaciones contra la explotación ilegal de yacimientos mineros, destruyendo maquinaria y otros elementos utilizados para esta modalidad delictiva.
Todas estas acciones se han llevado a cabo gracias a la loable labor y disposición de sus medios aéreos tripulados y no tripulados, con personal capacitado al servicio de los colombianos; aeronaves medicalizadas, de combate, transporte y carga, además de plataformas de inteligencia que se convierten en el factor decisivo con el que incansablemente se ejerce soberanía, día y noche en la zona suroccidental del país.
Su importancia operacional y ubicación estratégica ha sido clave en situaciones apremiantes, convirtiéndose en puente aéreo para la Fuerza Aérea y otras entidades, durante las manifestaciones sociales y la pandemia por covid-19, evitando de esta manera el desabastecimiento insumos primarios y el transporte de vacunas.
Por otra parte, el esfuerzo no armado de esta Unidad de su Fuerza Aérea Colombiana ha permitido beneficiar a las comunidades más vulnerables:
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Mediante las Jornadas de Apoyo al Desarrollo, atenciones médicas, de recreación y bienestar, 3.125 personas han podido acceder a los servicios y suplir necesidades básicas en salud.
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Más de 13 programas como “Así se Va A las Estrellas” se han realizado con instituciones públicas y privadas, acercando a la comunidad a la Unidad y dando la oportunidad que los niños, niñas y jóvenes conozcan la Fuerza Aérea.
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Con el apoyo a centros para el adulto mayor se ha logrado mejorar la calidad de vida de los abuelitos que se encuentran en situación de abandono.
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Pensando en la formación de los más pequeños, se llevaron a cabo reparaciones locativas de 2 instituciones educativas, una en la vereda San Antonio en Pradera, Valle y otra en el barrio Manuel María Mallarino en Cali.
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Campañas de prevención de reclutamiento forzado se han desplegado en diferentes municipios, entregando más de 168.000 volantes y cumpliendo misiones de perifoneo.
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Continuando con la preservación del medio ambiente se han plantado 1.955 árboles en lo corrido del año, participando cada viernes en jornadas con entidades ambientales.
Enmarcados en la conmemoración de los 103 años de su Fuerza Aérea Colombiana el comando Aéreo de Combate No.7 ratifica su compromiso operacional y social en el suroccidente del país. Encaminado en cumplir la responsabilidad que se le ha encomendado de “Conducir operaciones aéreas en contribución a la defensa de la soberanía, la independencia e integridad territorial, del orden constitucional, el logro de los fines del Estado y formar tripulaciones para el desarrollo de operaciones militares aéreas.”
Mediante el despliegue de sus capacidades, seguirá trabajando día y noche, llegando a las zonas de difícil acceso para contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de quienes más lo necesitan, así mismo continuará planeando y desarrollando misiones que contrarresten las estructuras criminales que históricamente han afectado esta región del país, enmarcados en principios y valores cumplirá su misión de volar, entrenar y combatir para vencer en el suroccidente del país.