El “gigante del aire” que ayuda a enfrentar el Covid-19 en el Amazonas
Han pasado más de 100 días desde que el Gobierno Nacional, frente a la grave situación de salud que afronta el mundo a causa de la pandemia por Covid-19 y siguiendo las recomendaciones de las diferentes organizaciones y entidades de salud, en el marco del decreto 417 del 17 de marzo de 2020, el Gobierno Nacional ordenó las medidas preventivas con las que buscaba preparar al país, con el objetivo de proteger la salud y la vida de los colombianos.
Fue así, como casi de manera inmediata, las Fuerzas Militares de Colombia, iniciaron la puesta en marcha de la denominada Operación "San Roque", una misión en la que, uniendo el esfuerzo de todos; el Ejército Nacional, la Armada Nacional y su Fuerza Aérea Colombiana, través de sus capacidades, se han convertido en Instituciones artífices y actores de primer orden en la asistencia humanitaria en el apoyo fundamental a la población civil más vulnerable.
Por su parte, su Fuerza Aérea Colombiana, con el alistamiento de sus aeronaves, sus tripulaciones capacitadas y personal militar de todas las especialidades, equipados con todas las medidas de bioseguridad implementadas por la Fuerza para el transporte de carga y personal, ha volado a hoy, 2.570 horas por todo el Territorio Nacional, en los que ha logrado transportar 1.204 toneladas de ayudas humanitarias y transportado a pacientes en delicado estado de salud, esto desde los rincones más apartados del país, hasta ciudades principales para recibir una atención de mayor nivel. Así mismo, ha realizado 412 de misiones de perifoneo aéreo y 822 misiones de perifoneo terrestre, llevando mensajes de recomendación para prevenir el contagio Covid-19.
El impacto por el nuevo coronavirus en el Amazonas, ha sido uno de los más complejos a nivel nacional, teniendo en cuenta que el departamento se mantuvo en la alerta roja durante varias semanas, por tener la mayor tasa de mortalidad por millón de habitantes en el país, a esta situación se le sumaba la poca infraestructura hospitalaria y médica, con las que contaba las dos entidades de salud que prestan los servicios en esta región.
En respuesta a la grave situación que afectaba a los conciudadanos presentes en la triple frontera, su Fuerza Aérea Colombiana, haciendo uso de sus aviones, como el FAC 0001 “BBJ” Presidencial, Fokker F-28, Júpiter-767, Casa-295, el Hércules C-130H, Titán C-40, King-350 y Caravan C-208, ha realizado hasta la fecha 70 vuelos en los que se han transportado 343.025 kilogramos de ayudas humanitarias, representados en canastas nutricionales, equipos médicos, elementos de bioseguridad, kits de aseo y personal de salud para fortalecer la atención a la comunidad amazonense.
Desde el inicio de la contingencia sanitaria, el avión Júpiter - 767 de su Fuerza Aérea Colombiana, con su gran capacidad para el transporte de carga, ha logrado llevar 142.323 kilogramos de ayudas humanitarias al Amazonas, con las que se han beneficiado las familias más vulnerables, muchas de ellas, pertenecientes a diferentes etnias indígenas.
De acuerdo con el Coronel Juan Carlos Ariza Triviño, Jefe del Centro de Comando y Control del Centro de Operaciones Aéreas de su Fuerza Aérea Colombiana "es importante conocer que está aeronave, es multi-rol al servicio de la Institución, su capacidad estratégica más importante, es reabastecimiento en vuelo, es decir suministrar combustible a las aeronaves Kfir, en operaciones especiales y de entrenamiento, pero también puede cumplir misiones de cargas pesadas, sobredimensionada, así mismo, tiene la capacidad de transportar hasta 202 pasajeros.
Para el transporte de carga pesada y voluminosa, el avión cuenta con dos bodegas espaciosas, pero también, puede ser adaptado en su interior, removiendo todos los asientos de la estructura principal, dándole a la aeronave el espacio suficiente para transportar hasta 32 toneladas”.
Según el también piloto militar del avión Júpiter, "este avión es importante para su Fuerza Aérea porque permite transportar un alto volumen y peso de carga a todas las regiones de país, afectadas por la pandemia de Covid-19" logrando impactar positivamente en un tiempo mínimo a puntos distantes y estratégicos de la Nación.
El oficial, hoy dice sentirse orgulloso de hacer parte de su Fuerza Aérea Colombiana, "es importante saber que soy parte de un equipo, de la aeronave más grande que tiene la Institución, con la que podemos llevar ayudas humanitarias a las familias más vulnerables por la pandemia".
Con los múltiples vuelos realizados, el "gigante del aire", el avión Júpiter, se ha convertido en un gran ángel de metal, que lleva en sus alas, esperanza a la Amazonía, una de las regiones más afectadas por la pandemia, logrando así, aportar a la preservación de comunidades ancestrales que con sus costumbres, tradiciones y legados se ha robado el corazón de su Fuerza Aérea y del personal militar del Grupo Aéreo del Amazonas, quienes cumplen con la misión en el extremo sur del país.
Así se va a las Estrellas.