FAC alista en Cali un simulador para pilotos
Aquel ‘pájaro’ metálico con las fauces de un tiburón de la Escuela Militar de Aviación Marco Fidel Suárez tendrá una tecnología con el sello de criollo para enseñarles a los futuros pilotos de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) cómo volar y hacer maniobras en zonas de difícil acceso en la geografía nacional.
Es el avión Cessna T-41 Mescalero, la versión militar del Cessna R-172 G/H, este último uno de los más fabricados en la historia y uno de los más utilizados en entrenamiento de fuerzas aéreas en el mundo.
Precisamente, con el ánimo de hacer más efectivo ese entrenamiento, el Grupo de Investigación en Estudios Aeroespeciales (GIEA), y con oficiales, suboficiales y cadetes de los tres programas académicos de Emavi desarrollaron y construyeron un simulador de vuelo con una inversión de 250 millones de pesos.
No es la primera vez que la Fuerza Aérea se destaca en trabajar tecnología con talento colombiano, pues en el 2007 empezó la construcción y del primer avión militar fabricado en Colombia y que fue mostrado listo hace dos años en la base aérea Marco Fidel: el T-90 Calima, por el nombre de una de las culturas indígenas de esta región del suroccidente colombiano.
Este es un avión monomotor, de tren de aterrizaje fijo y hecho completamente de material compuesto. Es tripulado por dos pilotos.
De acuerdo con la Emavi, con la iniciativa se busca aumentar la destreza de los pilotos, desarrollar la construcción y planificación de plataformas aportando al fortalecimiento de la ingeniería colombiana”.
Este simulador se diseñó para operar en el Cessna T-41 porque esta aeronave en la Base Aérea, en el nororiente de Cali sirve como avión de instrucción para todo el país.
La Emavi informó además que el proyecto surgió con el respaldo de la Dirección de Desarrollo de Capital Humano, del ministerio de Defensa, el cual hizo una convocatoria para crear este dispositivo.
Fue así que la escuela Marco Fidel Suárez se la ganó para fortalecer, a su vez y seguir aprovechando el avión Cessna T-41 Mescalero.
El simulador hará que los pilotos sientan las condiciones de misiones complejas, “adquiriendo así conocimiento previo de la aeronave para un mejor desempeño en sus horas de vuelo reales”.
La Emavi anotó que esta nueva tecnología también será útil en la formación de instructores. “El entrenador de vuelo brindaría la posibilidad de realizar capacitaciones a diferentes Fuerzas tanto nacionales como internacionales”, indicó.
Con este nuevo logro la Escuela Militar de Aviación “Marco Fidel Suarez”da cumplimiento a su visión de estar a la vanguardia de la investigación y desarrollo aeroespacial, para consolidarse como Escuela de pilotos de ala fija de la Fuerza Pública.
Un viejo ‘tiburón’
La Fuerza Aérea Colombiana explicó, además, que la historia de los aviones T-41 D en Colombia se remonta a 1968, cuando adquirió 30 de estas aeronaves, traídas en vuelo directamente desde su fábrica en Wichita, en Kansas (Estados Unidos). Aterrizaron en la escuela Marco Fidel Suárez y fueron maniobrados por pilotos colombianos.
Estos aviones fueron reparados por los mismos ingenieros de la FAC.
“Un tiempo después -según informes de la Fuerza Aérea- algunos T41D fueron destacados en otras unidades de la Fuerza Aérea, principalmente a las bases aéreas de Apiay, en Meta; Melgar, en Tolima, y Malambo, en Atlántico. Luego todos los T41D fueron concentrados en la Escuela Militar de Aviación de Cali y finales de la década pasada quedaban al menos nueve, entre ellos, el que tiene las fauces de tiburón en su nariz.
