FAC descarta ataque a avión que cayó en Codazzi
La Fuerza Aérea Colombiana informó que llegó a tal conclusión luego de utilizar procesos de simulación.
El general Carlos Bueno, comandante de la Fuerza Aérea Colombiana, habló con LA F.m. de los resultados del siniestro de un avión que le costó la vida a 11 uniformados, el 31 de julio anterior.
Según dijo el oficial, se constituyó un equipo de expertos para establecer las causas del accidente del avión CN-235 de la FAC 1261 y se concluyó que no hubo ataques a la aeronave. De acuerdo con el informe, los pilotos activaron el protocolo de seguridad luego de las condiciones climáticas generaran una formación de hielo en el aparato.
De igual manera, el comité investigador explicó que el fuego en el avión tuvo lugar luego del impacto de la aeronave en tierra y no antes. De este modo, la Fuerza Aérea descartó cualquier ataque de explosivo e insistió en que las condiciones adversas del clima precipitaron la caída del avión 35 minutos después de despegar.
El general Bueno agregó que se hicieron simulaciones de vuelo para ser precisos con las conclusiones. Estas fueron sus declaraciones.
Al respecto la FAC emitió el siguiente comunicado:
Condiciones climáticas causaron accidente de Casa 1261 de la FAC
Las difíciles condiciones climáticas y el ‘engelamieto’ severo de uno de los planos de la aeronave Casa 1261 de Fuerza Aérea, que se accidentó el pasado 31 de julio en Codazzi (Cesar), fueron las causas del siniestro, según lo confirmó el informe final de las investigaciones conjuntas entre la FAC y el fabricante, Airbus Military Casa.
Técnicamente se conoce como ‘engelamiento’ a la formación de hielo en los planos de las aeronaves debido a las condiciones climáticas adversas con altas cargas de hielo y agua en las nubes, que generalmente se ubican entre los 16 y 30 mil pies de altura, espacio en el que volaba el Casa 1261.
Luego de analizar las posibles causas de accidente se descartó por completo un ataque por misil o tatuco artesanal, pues no se encontraron evidencias de restos o marcas de explosivos. Además, en el momento del hecho había alta nubosidad en el área donde ocurrió el siniestro.
“Los restos no evidencian que la aeronave haya sufrido impactos o algún tipo de ataque o haya sido tocado o golpeado por un material externo y no se encontraron tampoco restos ni marcas de explosivo en la estructura del fuselaje u otra parte”, informó el coronel Jaime Betancourt, jefe de Investigaciones de Seguridad Aérea de la Fuerza Aérea Colombiana.
El informe entregado por el coronel Betancourt reveló, además, que las evidencias halladas en los restos de la aeronave descartaron fallas de motor o de la estructura del fuselaje y los planos.
“La tripulación evidenció formación de hielo en la aeronave, identificándolo en el plano derecho; el piloto inmediatamente, por su preparación y entrenamiento, ordenó conectar los sistemas de deshielo, los cuales al momento presentaron una alarma de sobrecalentamiento, por lo tanto inició los procedimientos para corregir la situación –explicó Betancourt–. El piloto comenzó el descenso, iniciando la pérdida de control de la aeronave, lo que ocasionó la pérdida de sustentación. Esto generó giros en vertical y su posterior impacto contra el terreno”.
El informe señaló también que los acondicionamientos para sistemas de inteligencia, instalados por la Fuerza Aérea Colombiana en el Casa 1261, no afectaron la estructura ni fueron determinantes en la aerodinámica de la aeronave, por lo que se descartó relación directa con el accidente.
“Es contundente: así como no hubo ninguna causa asociada externa, como inicialmente se había pensado en un misil –que está descartado técnicamente–, de igual manera la conclusión conjunta del equipo investigador de la empresa Airbus Military Casa y la Fuerza Aérea Colombiana concluyen que no están asociadas las modificaciones realizadas a la aeronave con esta situación o esta pérdida de control. Esta aeronave ya había volado 170 horas con sus equipos sin ninguna situación adicional, aquí realmente, y debe quedar muy claro, es que el vuelo en condiciones de ‘engelamiento’ severo fue lo que realmente causó el accidente”, puntualizó el comandante de la Fuerza Aérea, general Carlos Eduardo Bueno Vargas.
El ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, por su parte agradeció la celeridad y efectividad en las investigaciones realizadas de manera conjunta entre la Fuerza Aérea y el fabricante de la aeronave.
“Me parece que vale la pena destacar que la paciencia del Gobierno para esperar las conclusiones finales ha sido evidente y me complace mucho saber que la hipótesis más probable inicialmente planteada por la FAC, por el Ministerio de Defensa y por el Gobierno se confirma plenamente con este informe técnico”, concluyó Villegas.