La Radioafición y el proyecto satelital de la Fuerza Aérea Colombiana
Las agrupaciones de radioaficionados han sido creadas a lo largo del tiempo por intelectuales ávidos de conocimiento con un especial interés en aprovechar al máximo la tecnología de la radio. Ese objetivo continúa hoy día siendo su razón de ser, el cual encaja perfectamente con el desarrollo de la educación en ciencia, tecnología, ingeniería y la investigación aplicada que se deriva de estas ramas del saber fortaleciendo las capacidades de la Fuerza Aérea Colombiana.
El énfasis de esta actividad en investigación práctica y experimentación la convierten en una herramienta ideal para facilitar a los cadetes de la Escuela Militar de Aviación la comprensión de temas técnicos relacionados con la electricidad, electrónica y telecomunicaciones, permitiendo al personal de docentes desarrollar a futuro planes de lección de aplicación práctica como teórica. El uso de estas tecnologías desde el punto de vista de la investigación formativa proporciona las herramientas que favorecen la construcción de bases sólidas en múltiples campos de la ciencia. Como herramienta de enseñanza y hobby, ha demostrado ser de gran influencia motivadora en los estudiantes para la selección de profesiones relacionadas con las ciencias de la computación, electrónica, ingeniería de radiodifusión, ciencias de la investigación, telecomunicaciones, entre otras. Más allá de eso, esta loable práctica fomenta la participación de la comunidad, a la vez que traspasa los límites sociales, políticos, culturales, geográficos y de discapacidad física, contribuyendo a formar profesionales más íntegros; más aun teniendo en cuenta que la investigación realizada por operadores de radio afición ha facilitado la fundación de nuevas industrias, construido economías, empoderado naciones y salvado vidas en situaciones de emergencia.
Es de importancia resaltar el rol de los grupos de radioaficionados y la capacidad de participar en los avances realizados por la Fuerza Aérea Colombiana en el ámbito aeroespacial; todo esto gracias a los conocimientos adquiridos que se proyectan utilizar en el corto plazo para el lanzamiento del FACSAT-1, el primer nanosatélite de la institución que será puesto en órbita, así como del FACSAT-2, satélite que será integrado en la Escuela Militar de Aviación (EMAVI) y será puesto en órbita en el segundo semestre del año 2019. En este proyecto participaron oficiales, docentes y cadetes que asistieron a los talleres desarrollados por la empresa Gomspace de Dinamarca, lo cual permitirá a esta escuela, desarrollar un programa espacial donde se involucra el personal de estudiantes de sus diferentes programas académicos.
Durante este proceso de transferencia de conocimientos se tuvo como objetivo principal proporcionar al personal asistente la instrucción necesaria para la operación de la estación terrena y la aplicación del software y hardware del modelo de ingeniería del FACSAT-1, satélite que será operado en el espectro de frecuencias pertenecientes al grupo de radioaficionados, las cuales son asignadas por el Ministerio de Telecomunicaciones. Paralelamente, se realizó la instalación de las antenas de recepción y transmisión por parte del personal de la escuela, y se entrenó en la operación de los equipos y el protocolo de conexión del servidor, la caja de control y las antenas. Posteriormente, se realizó la transferencia de conocimientos con el fin de proporcionar al grupo de alumnos herramientas, procedimientos, procesos e información necesaria para el diseño, desarrollo y operación de sistemas espaciales a fin de estructurar el diseño del FACSAT-2, el próximo reto a ser asumido por el Centro de Investigación en Tecnologías Aeroespaciales de la EMAVI. Adicionalmente, el curso presentó la metodología requerida para el desarrollo proyectos desde la perspectiva del ingeniero de sistemas espaciales, incrementando el nivel de comprensión del tema y fortaleciendo el desempeño de los integrantes del curso durante la ejecución de este tipo de proyectos de ingeniería en el corto plazo.
El FACSAT-1, dispondrá de una carga útil abordo, compuesta por una cámara con una resolución de 30 metros por pixel, la cual tendrá una capacidad de toma de imágenes de máximo 500 kb y pondrá en práctica procedimientos de transmisión satelital mediante comandos al satélite referentes a la administración de energía, control de actitud y operación de la cámara, así como la recepción de datos en las radiofrecuencias, logrando con esto el desarrollo de doctrina espacial para futuros proyectos.
Adicionalmente, una vez puesto en órbita el satélite, el cual tendrá una órbita polar y pasará dos veces al día por el territorio colombiano, se logrará el desarrollo de la pericia necesaria en el personal de operadores integrantes del proyecto gracias a la constante operación del software de control, asimismo, se podrá refinar la calidad de las imágenes tomadas para ser utilizadas con fines académicos en los trabajos de grado del personal de estudiantes en temáticas relacionadas con la recuperación de áreas degradadas por minería ilegal, cultivos ilícitos, así como el fortalecimiento de parques nacionales y sistema de áreas protegidas.
Este proyecto que dentro de contados meses será puesto en funcionamiento llevó a cabo la vinculación del grupo que lo integra en la Liga Colombiana de Radioaficionados, requisito que exige el Ministerio de Comunicaciones para poder elevar la solicitud a la Unión Internacional de Radioaficionados IARU; con esto se espera, tener las autorizaciones para el lanzamiento y muy pronto comenzar a trabajar en red con entidades educativas de formación superior y aquellas que promuevan la ciencia y la educación en el ámbito aeroespacial; trabajando en equipo en convenio y alianzas estratégicas se pretende establecer la hoja de ruta que permitirá no sólo conectar las antenas del segmento de control, sino también diseñarlas, desarrollo e integración de nano satélites, sistemas de lanzamiento de órbita baja y estaciones de control y seguimiento.
