La salud llegó a La Apartada, un pueblo que busca olvidar la guerra
La vida en La Apartada (Córdoba) es dura y sus más de 13.000 habitantes lo saben. No fue fácil sobrevivir a las amenazas, intimidaciones y masacres de los grupos armados
Aunque esos episodios violentos se han ido superando con el tiempo, a muchos la sombra del dolor los persigue. Basta con caminar por el municipio, bajo el inclemente sol y una temperatura que alcanza los 27 grados centígrados, para encontrarse con historias que no tuvieron un final feliz.
Justo frente al Hospital de La Apartada y mientras el equipo médico de la Fundación Alas para la Gente atendía sin descanso a unas 1.000 personas de la parte rural del municipio –durante una jornada de salud– algunos se atrevían a narrar su tragedia.
“Después de las 6:30 de la tarde no podíamos salir de la casa. Había que quedarse quietecito para que no le pasara nada. Al rato, se empezaban a oír los tiros y al día siguiente nos enterábamos de quién era el muerto”, contó una mujer que vio cómo su esposo perdía la vida en uno de esos hostigamientos.
Mientras tanto, en el centro médico otros pobladores llegaban hasta los consultorios de los galenos por malestares físicos que no eran más que las secuelas del conflicto.
No conciliar el sueño en las noches, los fuertes dolores en los huesos y en la espalda eran para Mauricio Flórez, especialista en medicina alternativa y quien viajó desde Bogotá con el equipo de Alas, la clara muestra del síndrome de una paranoia de guerra.
“Es masivo. Llegan con dolores de espalda, estrés y sin poder dormir. Esos son los resultados de la guerra, de lo que vivieron y aún no olvidan”, dijo.
El traslado hasta esta región del noroccidente del país se logró gracias a los aviones de la Fuerza Aérea, mientras el acceso a los medicamentos y la logística tuvo que ver con el apoyo de la Unidad de Consolidación Territorial, Cerro Matoso, la Fundación San Isidro, el Ejército Nacional, la fundación Volver, Global Datos, la Universidad Antonio Nariño, Hotel el Mesón Gitano y Llanera de Aviación. Así mismo, el Ministerio de Salud y Protección Social, el Departamento para la Prosperidad Social y EL TIEMPO Casa Editorial pusieron su granito de arena. En total, se adelantaron 829 consultas y 905 procedimientos.
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