Primera línea de combate contra el COVID-19
Ser piloto o aviador militar es estar preparado ante cualquier situación de conflicto o de misiones humanitarias, durante el vuelo ejercen y colocan en marcha sus conocimientos especializados en aviación de combate, permitiendo accionar su poder ofensivo o defensivo en el campo aire – aire o aire – tierra, este tipo de estrategias y tácticas militares llevan a los pilotos a tomar decisiones bajo presión, y es ahí donde muestran su seguridad, valentía, disciplina y responsabilidad.
Sus aeronaves van desde ala rotatoria, ala fija y aviones remotamente tripulados, donde desarrollan misiones de ataque, de guerra electrónica, bombardeo, búsqueda, rescate, transporte de carga y de personal, entre otros; los cuales permiten ejercer supremacía aérea para proteger la soberanía y fortalecer la defensa nacional, tanto a nivel interno como externo. Siendo enviados a cumplir dichas misiones en cualquier parte del mundo ofreciendo apoyos militares y decisivos para llegar a la victoria.
El éxito de las operaciones se ven reflejadas en la contundencia en el combate y en la oportunidad de salvaguardar vidas, es allí donde se trata de cuidar el tesoro más valioso para cualquier ser humano y es su integridad. Por esta razón, su Fuerza Aérea Colombiana despliega sus alas para llegar a todo el territorio colombiano, contando con múltiples aeronaves y tripulaciones cuyos objetivos están enmarcados con lo que dicta la carta magna constitucional.
De esta manera, aeronaves como el Cessna Caravan C – 208 medicalizado llegan a los lugares más apartados, como es el caso del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, que cuenta con pilotos militares que junto con sus tripulaciones altamente capacitadas brindan un servicio aeromédico óptimo y oportuno. Siempre viendo la necesidad y requerimientos a quienes más lo necesitan.
Para ahondar en detalle acerca del trabajo de quienes trabajan desde el aire, surcando sobre el departamento insular, en entrevista realizada al Técnico Primero, Henry David Cristancho del curso 75 de Suboficiales y tripulante de las evacuaciones aeromédicas del Grupo Aéreo del Caribe.
¿Por qué quiso ser parte de su Fuerza Aérea Colombiana?
Desde muy pequeño tenía pasión por las artes de la guerra y la aviación, culminé mis estudios de secundaria en el Colegio Cooperativo de Funza, una ciudad cerca a Madrid - Cundinamarca, entonces en el proceso de incorporación me enteré que en la Escuela de Suboficiales de la Fuerza Aérea Colombina podía cumplir mis dos sueños en una sola carrera. Además de proteger la vida de los colombianos.
¿Cuál ha sido su experiencia en el cumplimiento de misiones humanitarias?
Yo he sido tripulante de aeronaves como el Vulcano y el Caravan, en los dos aviones he participado con el cumplimiento de misiones humanitarias, no hay nada más satisfactorio que contribuir a salvar una vida o llevar alimentos y medicinas a los colombianos que lo necesitan, el que no nació para servir, no sirve para vivir.
¿Qué significa para usted ser tripulante militar de la aeronave Caravan Cessna 208 B?
Que la Fuerza Aérea Colombiana me permitiera ser tripulante del Caravan me llevo más cerca a cumplir mis sueños de volar, estar en la cabina al lado del piloto apoyando las diferentes fases del vuelo, me han permitido desarrollarme profesionalmente y me siento orgulloso de poder servir a mi país.
En tiempos de pandemia, ¿bajo qué lineamientos y protocolos de bioseguridad se enmarcan para continuar cumpliendo con la misión Institucional? y ¿qué es la operación San Roque?
La Fuerza Aérea ha desarrollado diferentes lineamientos y protocolos de bioseguridad que las tripulaciones seguimos rigurosamente con el fin de proteger a nuestras familias, amigos, superiores, subalternos y compañeros. Proteger el recurso humano en estos tiempos de pandemia es lo más importante para poder cumplir la misión Institucional.
La Operación San Roque son todas las misiones que cumple la Fuerza Aérea Colombiana con el fin de evitar que la pandemia COVID-19 llegue más cerca de la puerta de la casa de los colombianos. Se vuela para prevenir, apoyar y salvar las vidas afectadas por la enfermedad.
Por último, ¿Cuál es el mensaje que quiere dar a los colombianos?
Los colombianos somos un pueblo que siembre ha salido adelante, con disciplina, trabajo y esperanza, vamos a salir de esta pandemia con la frente muy alto y lograr alcanzar nuestros objetivos personales y profesionales. La Fuerza esta para apoyarlos y servirles, darle una mano amiga a quien lo necesite. Quédate en casa y recuerden que somos su equipo.
Con una larga trayectoria como tripulante de aeronaves medicalizadas, el Técnico Primero Henry Cristancho, continúa brindando todos sus conocimientos en aviación para la nación, combatiendo en primera línea la pandemia el virus del COVID-19, transportando pacientes que necesitan de una atención médica especializada en centros de mayor nivel y que durante el vuelo son atendidos por médicos militares de aviación, que día a día realizan misiones humanitarias donde su principal objetivo es velar por la seguridad e integridad de todos los colombianos.