Aeronaves Remotamente Tripuladas, una capacidad de su Fuerza Aérea
Las Aeronaves Remotamente Tripuladas (ART), son sin lugar a dudas, fundamentales en las operaciones de su Fuerza Aérea Colombiana, ya que con estas se desarrollan importantes misiones que aportan al cumplimiento de la misión institucional, ejerciendo la defensa de la soberanía, la independencia, la integridad territorial, el orden constitucional y contribuir a los fines del estado.
El Comando Aéreo de Combate No. 6 de su Fuerza Aérea Colombiana, ubicado en Tres Esquinas (Caquetá), cuenta con Aeronaves Remotamente Tripuladas, las cuales tienen la capacidad de volar en condiciones diurnas y nocturnas, con una autonomía suficiente para realizar sostenimientos en el aire por periodos prolongados de tiempo.
Los principales objetivos de estas aeronaves, son la protección de vidas humanas, el control, reconocimiento vigilancia de municipios y ciudades, vías principales, oleoductos, entre otros, con el fin de incrementar los esfuerzos para la protección del pueblo colombiano ante posibles actos terroristas o ilegales.
Dentro de los procesos de la Fuerza Aérea, la innovación hace parte como uno de sus pilares y mayores compromisos en el marco de una mejora continua. Es por medio de las ART, que la FAC apunta al futuro, incursionando en esta nueva modalidad de aviación, buscando la eficiencia y máxima calidad para el desarrollo de sus operaciones aéreas, de tal forma que la consolidación de los resultados sean exitosos; cabe recordar que este recurso cumple con los más altos estándares de calidad y aporta de manera significativa en la ejecución de operaciones aéreas.
Desde el año 2006, la Fuerza Aérea inició con la implementación de este sistema en el Comando Aéreo de Combate No 6, y posteriormente en el Grupo Aéreo del Oriente; al ver su alta efectividad en resultados, esta plataforma se extendió a lo largo y ancho del territorio nacional. Ya son 14 años de experiencia y sinergia operacional entre las diferentes Fuerzas Militares, con la cuales las ART han contribuido para combatir diferentes tipos de flagelos como la extracción ilícita de yacimientos mineros, la deforestación y el narcotráfico.
Operaciones militares con objetivos de alto valor, han sido efectuadas gracias al enfoque e información que este tipo de aeronaves brinda, como lo menciona un operador del equipo de ART, pues dentro de su testimonio informa que son largas jornadas de vuelo y mucha práctica y estudio las que se necesitan para lograr dominar de manera impecable el sistema, pero son los resultados operacionales los que hacen que valga la pena tanto esfuerzo y sacrificio.
Por otro lado, es de mencionar que los cambios meteorológicos repentinos que se presentan en esta región del país son un gran desafío para los operadores y comandantes de misión, ya que esta es una característica que se presenta frecuentemente en el Caquetá y Putumayo, razón por la cual los tripulantes se capacitan y entrenan de manera constante, con el fin de sortear estas condiciones y aportar al cumplimiento de la misión.
Cabe destacar que el Escuadrón de Aeronaves Remotamente Tripuladas del Comando Aéreo de Combate No. 6, se ha logrado destacar gracias al gran número de operaciones y horas de vuelo realizadas a lo largo de estos últimos años, pues las tripulaciones y aeronaves de este escuadrón siguen comprometidas con la misión principal de la Fuerza Aérea Colombiana, volando, entrenando y combatiendo para vencer.
Así se va a las estrellas.