Por primera vez tres controladoras aéreas al mando de la Torre de la Base Aérea de Cali

Por primera vez en siete años de historia del Comando Aéreo de Combate No.7 (CACOM-7) de su Fuerza Aérea Colombiana, tres mujeres de la especialidad de Comunicaciones Aeronáuticas tuvieron bajo su mando de operación la Torre de Control de la Base Aérea Marco Fidel Suárez, asegurando todos los estándares para el cumplimiento de la misión de la institución con seguridad, orden y eficiencia. El papel de las controladoras aéreas: La controladora aérea se encarga de velar por la seguridad de las operaciones que realizan las aeronaves, en este caso las aeronaves del Comando Aéreo de Combate No.7 las cuales operan en todo el suroccidente colombiano y las aeronaves de instrucción de la Escuela Militar de Aviación en las que se preparan los futuros pilotos militares. Específicamente, la labor que se cumple en la torre de control está centrada en asegurar que los vuelos sean seguros tanto para la tripulación como para los pasajeros. El área de manejo y la responsabilidad de este cargo es hacer que no exista ningún problema, en los despegues, durante el vuelo y en los aterrizajes. Una profesión con altura Este cargo, en muchas ocasiones, es asociado directamente con los hombres, pero este concepto se ha dejado a un lado y cada día son más las mujeres que trabajan en este campo. Es así como la Técnico Tercero Paola Vargas, la Técnico Cuarto Gina Rodríguez y la Aerotécnico Diana Pachón hacen parte del escuadrón de Navegación Aérea de CACOM-7. Estas tres mujeres, suboficiales de la Institución, estudiaron y se capacitaron en esta especialidad para cumplir un sueño, ser parte de su Fuerza Aérea Colombiana y ser los ojos en tierra de las aeronaves militares. Para la Técnico Tercero Paola Vargas hacer parte de este escuadrón es “una experiencia muy gratificante ya que se observa mucho el trabajo en equipo y aunque haya diferentes posiciones de control, cada una de las personas que se encuentran allí deben funcionar como un engranaje para llevar a feliz término cada uno de los vuelos que operan en nuestra aérea de responsabilidad”. Es así como con este engranaje las controladoras aéreas, dividen las secciones y cada una se encarga que en la operación no existan colisiones entre las aeronaves, informan condiciones meteorológicas y todo lo que conlleva este cargo según lo escrito en la normativa. La técnico tercero Rodríguez afirma que, “es un trabajo de alto compromiso porque a diferencia de otras carreras, de la información que nosotras brindemos y el control que generamos dependen muchas vidas, es una responsabilidad enorme, por eso siempre tenemos ojos y mente en la tarea, de esta manera se han terminado todos los servicios sin ningún problema y con la satisfacción del deber cumplido, ese es el mejor reconocimiento que se puede tener. Con el paso de los años y actualmente, en las diferentes unidades aéreas de la Fuerza Aérea Colombia, el cargo de controlador aéreo no es excluyente, no importa si es hombre o mujer, lo relevante es el conocimiento y sus habilidades, para la Aerotécnico Diana Pachón, “Cada posición de control requiere un nivel de conocimiento y pericia que solo se va adquiriendo con el trabajo día a día con las capacitaciones que se reciben desde el momento en el que se llega a una Unidad Militar en la que fue destinado a laborar, donde se brinda información meteorológica, hasta organizar el tránsito en el circuito de aeródromo de aeronaves de acuerdo al performance y finalmente lograr que aterricen sin ningún evento de seguridad, es algo que solo se logra con dedicación, estudio y practica”. Para estas tres mujeres hay una cosa en común, no existe ninguna diferencia de género, “el rol de las mujeres en las Fuerzas Militares es exactamente el mismo que desempeñan los demás integrantes de la Institución, debido a que contamos con las mismas capacidades para desarrollar las labores que nos han sido encomendadas, además de tener la gran responsabilidad en nuestras manos de demostrar que en realidad no somos un sexo débil y que podemos llegar tan lejos cuando nos lo proponemos” afirma Vargas. Vargas, Rodríguez y Pachón seguirán capacitándose y trabajando para desempeñar uno de los roles más importantes para el desarrollo de las operaciones aéreas, el trabajo en equipo que conlleva su cargo aportará al cumplimiento de la misión de volar, entrar y combatir para vencer.