Esta estrategia tiene como objetivo la erradicación voluntaria de los cultivos ilícitos en el territorio y la intervención del Estado con los componentes de transformación productiva lícita, sostenibilidad ambiental; fortalecimiento socio empresarial y comercial; y formación técnica, bajo el reconocimiento de las prácticas territoriales ancestrales, el derecho a la restitución y fortalecimiento de su territorialidad.