Luego del ingreso de las primeras mujeres pilotos a la Fuerza Aérea Colombiana en el año 1997, se inicia una nueva etapa, que trajo consigo la preparación de siete de ellas en este campo, quienes alcanzaron en el año 2000 las tan anheladas alas de vuelo como piloto militar de la Institución, y así incursionar en el maravilloso mundo de la aviación, teniendo la oportunidad, al igual que los hombres, de comandar aeronaves destinadas a salvaguardar la soberanía de la nación. Es allí donde se abren las puertas para que el personal femenino se motive a descifrar las experiencias que se viven al sobrevolar el cielo azul de nuestro país.