Cadete dominicano vuela solo por primera vez en la Fuerza Aeroespacial Colombiana
Convertirse en piloto militar va más allá de surcar los cielos; implica asumir con firmeza la responsabilidad de proteger la soberanía, mantener altos estándares de desempeño y fortalecer el espíritu de compañerismo, cada despegue es el resultado de una meta trazada y alcanzada con disciplina; así lo ha demostrado el Cadete Josthyn Hilario, de la Fuerza Aérea de República Dominicana, quien culminó con éxito el Curso Primario de Vuelo en la Escuela Internacional de Ala Fija, ESIAF, de la Fuerza Aeroespacial Colombiana.
El curso desarrollado en el Comando Aéreo de Combate No. 1, en Puerto Salgar, Cundinamarca, ha brindado al futuro Oficial una formación especializada en la aeronave Cessna C-172-S, afianzando además conocimientos fundamentales como: sistemas del avión, regulaciones aéreas locales, factores humanos, seguridad operacional, limites, emergencias, entre otros, al tiempo que fortalece habilidades de liderazgo, adaptabilidad y toma de decisiones críticas, esenciales para su rol como piloto militar.
Tras un exigente entrenamiento que incluyó 17 horas de vuelo reales, cinco simuladas y ocho exámenes, el Cadete Hilario superó con éxito la etapa inicial conocida como pre solo, avanzando ahora hacia el periodo de progreso y la fase de instrumentos, donde enfrentará nuevos retos que demandarán aún más su precisión y destreza en el aire.
Este logro no solo resalta la capacidad del joven dominicano, sino también la importancia de la cooperación internacional, que permite la unión de talentos en la formación de aviadores comprometidos con la soberanía de sus países; cada vuelo es un homenaje a las raíces y una promesa de servicio con las naciones.
Su Fuerza Aeroespacial Colombiana celebra este importante paso en la carrera del alumno de vuelo y reafirma su misión de formar líderes integrales que, más allá de dominar el cielo, sean un ejemplo de disciplina, perseverancia y amor por la patria.