La pasión y entrega de un civil de su Fuerza Aérea, cumpliendo sus sueños
El comando Aéreo de Transporte Militar-CATAM, es una unidad estratégica de su Fuerza Aérea Colombiana, que diariamente cumple operaciones militares de transporte aéreo, cuenta con una amplia historia de 76 años al servicio de la nación; ha sido la casa de Oficiales, Suboficiales, personal civil y soldados que han dejado un legado en cada rincón de esta Unidad.
Ha llevado a cabo innumerables misiones con el fin de proteger la soberanía, la independencia e integridad territorial, del orden constitucional y el logro de los fines del Estado, pero sobre todo ha estado presente año tras año en las situaciones más difíciles que ha tenido que afrontar Colombia.
Cada uno de los grupos de esta Unidad cumple con una función esencial que ha permitido el engrandecimiento y reconocimiento de la misma.
El Grupo Técnico del CATAM, cuenta con diversos talleres que se encargan del mantenimiento preventivo de cada aeronave que se encuentra en la Unidad Aérea, tal es el caso del Taller de Eléctricos que se encarga del mantenimiento y recuperación de sistemas eléctricos e instrumentos de las aeronaves asignadas a la unidad, así como prestar apoyo a los aviones transeúntes, con el fin de garantizar una operación aérea segura.
Un taller donde trabajan varios Oficiales, Suboficiales y civiles que entregan todo su conocimiento para el cumplimiento, efectivo y eficiente, de la misión de su Fuerza Aérea Colombiana.
El señor AS-22 Freddy Andrés Bello, de 40 años, ha hecho parte de la Familia Aérea por mas de 12 años hace parte del taller de Eléctricos e instrumentos del GRUTE en el cual ha realizado aportes importantes cómo generación de nuevas propuestas, disminución de problemas e innovación de proyectos en el área de mantenimiento aeronáutico.
¿Cuál es su mayor motivación para trabajar en esta Institución Aérea?
El mayor motivo es que puedo ver una manera de progresar y desarrollarme profesionalmente, realizando un trabajo interesante, donde día a día crezco personalmente, adquiriendo nuevas experiencias que me brinda la Fuerza Aérea; como viajar por todo el país tratando de solucionar las diferentes novedades que presentan las aeronaves, lo que es una experiencia inolvidable.
Doy gracias a Dios por darme la oportunidad de poder trabajar en esta institución que me abrió las puertas para poder trabajar en los sistemas eléctricos que era uno de mis propósitos.
¿Porqué razón desarrolla proyectos en el área de eléctricos?
Estos proyectos nacen de mi pasión de aportarle a mi querida Institución, así como de la necesidad de mejorar el mantenimiento en las aeronaves; de igual forma, han surgido de mantenimientos recurrentes que a lo largo del tiempo se nos han presentado, haciéndome pensar de manera más asertiva y poder resolver más rápido los problemas que pueden surgir en estos complejos circuitos eléctricos, diseñando y adaptando en pro de mejorar sus funcionamientos.
Esto de diseñar bancos me apasiona ya que viene de familia; tanto mi papá, como mis hermanos trabajan fabricando y desarrollando maquinas industriales, de allí el amor por estar innovando y diseñando nuevos bancos de trabajo, los cuales nos facilitan el trabajo de manera precisa.
¿Con quiénes realiza los proyectos?
Los proyectos los he realizado en conjunto con el personal militar y civil, son ellos quienes me han apoyado en las ideas e investigaciones, siempre partiendo de las necesidades que hemos observado. Así mismo, siempre estoy presto a brindar mis conocimientos dando asesorías a los alumnos de Escuela de Suboficiales Fuerza Aérea – ESUFA, en sus proyectos de grado, plasmando ideas y necesidades y emprendiendo análisis para buscar la mejor solución y así mejorar y facilitar el trabajo del técnico aeronáutico.
¿Cuál su principal motivación para continuar con este trabajo?
Sin duda la familia, poder sacar adelante y poder brindarles un mejor futuro, a mi madre bríndale lo mejor ya que ella con su trabajo nos dio lo mejor que pudo en nuestra niñez, por eso una motivación es que ella se sienta orgullosa de sus hijos, dejar una huella importante en el camino y un ejemplo claro.
También ha sido importante mi abuelo, quien trabajo trabajó en la Fuerza Aérea Colombiana durante 37 años, y mi abuela se encargo de contarnos todas las historia del abuelo, sus vuelos, las bases donde estuvieron y las anécdotas que nunca faltan, esto también es una motivación para mí ya que aunque ha pasado el tiempo aún siguen vigentes sus historias.
¿Cuál es el proyecto que más lo apasiona y cuál es el aporte significativo a la Fuerza Aérea Colombiana?
La aeronave AC-47T Fantasma cuenta con una ametralladora GAU-19 que proporciona un importante poder de fuego contra objetivos en tierra. En el 2014 el taller de armamento aéreo de CAMAN nos pidió que realizáramos un estudio eléctrico con la posibilidad de instalar dos ametralladoras GAU-19 y así fortalecer el poder de fuego del avión fantasma.
Esta era una gran oportunidad de fortalecer mis conocimientos y explorar nuevos campos, así que empezamos a diseñar un sistema de armamento en el cual contará con dos ametralladoras GAU-19, una seria stand by de la principal con el fin de reducir los tiempos muertos de amunicionamiento y obtener mayor disponibilidad del armamento, con la posibilidad de cuando el combate sea más fuerte se pudieran disparar las dos ametralladoras.
Esto era un gran reto para mí, así que empezamos a realizando pruebas de carga al sistema actual de armamento, diseñando diagramas eléctricos, después de tener unas bases claras fabricamos un banco en tierra donde pudiéramos simular las condiciones del sistema de armamento, el cual tres meses después pudimos alcanzar el objetivo. Así llego el momento de probar lo que se había logrado en tierra ahora en el aire: se realizaron tres vuelos en los cuales efectuamos polígono con las ametralladoras; esto para mí fue muy satisfactorio, ver el sistema funcionando después de mucho estudio y tener al mismo tiempo la oportunidad de volar en una aeronave de combate y ver el poder tenía, esta fue una de mis mejores experiencias como técnico, y con esto aportar un granito de arena al fortalecimiento de nuestra Fuerza Aérea Colombiana.
Como él, hay cientos de personas que, sin distinción de rangos, apuntan a un mismo objetivo: enaltecer el nombre de su Fuerza Aérea Colombiana desde su lugar de trabajo, sin esperar ser notados, simplemente por el amor y la esperanza de aportarle a Colombia y sus compatriotas ese “granito de arena” que los hace sentir orgullosos.
Un sentimiento que debe ser apreciado y difundido, en pro de mostrar de manera generosa las capacidades del personal de su Fuerza Aérea Colombiana.
¡Así se va a las estrellas!