Muerto el número uno del brazo terrorista de las Farc
El Ministerio de Defensa Nacional, las Fuerzas Militares y la Policía Nacional de Colombia informan a la opinión pública nacional e internacional que.
El miércoles 22 de septiembre a la 1:00 a.m. se inició la operación militar Sodoma, en la región de la Macarena, departamento del Meta, contra un campamento del Bloque Oriental de las Farc.
La Operación Sodoma se diseño y se ejecutó conjuntamente por el Ejército Nacional, la Fuerza Área, la Armada Nacional y la Policía Nacional de Colombia, a partir de información detallada de inteligencia recopilada y analizada durante el último mes.
En el marco de la operación fue muerto en combate alias Jorge Briceño Suárez, Mono Jojoy, integrante del Secretariado de las FARC y cabecilla del Bloque Oriental. Su muerte es el golpe más duro propinado a esa organización terrorista durante toda su historia.
Este criminal llevaba 35 años en las FARC. Fue el responsable de la toma y destrucción de poblaciones, la muerte de cientos de civiles y la realización de múltiples masacres.
Ejecutó los asaltos a las bases de Miraflores, Las Delicias y Patascoy, al igual que a los puestos de Policía de Puerto Lleras y Puerto Rico, entre otros.
Su actividad criminal incluyó la realización del atentado contra el Club El Nogal, en Bogotá, en 2003, en el cual murieron 36 personas y otras 200 fueron heridas.
El Mono Jojoy era el número uno del brazo terrorista de las FARC, encargado de secuestros y de ordenar la instalación de minas antipersona. Desde los años ochenta su actividad incluyó el narcotráfico en el sur del país y era considerado el hombre fuerte de la organización narcoterrorista.
El Ministerio de Defensa reconoce el liderazgo, la disciplina y el valor de la Fuerza Pública colombiana. Esta operación limpia e impecable es demostración del profesionalismo de las Fuerzas Militares y de la Policía Nacional.
A los miembros de las FARC y del ELN un mensaje: entréguense a las unidades militares y de policía. Se les garantizará su vida e integridad.
A alias Alfonso Cano que se entregue. El gobierno nacional y las autoridades judiciales le garantizaran la vida.
Las fuerzas están y seguirán a la ofensiva. La consigna sigue siendo arreciar, arreciar y arreciar. La paz se conseguirá mediante el ejercicio de la autoridad y de la mano de la Constitución, no cediendo, ni sometiéndose al terrorismo.
Los colombianos conquistaremos la paz por la razón o por la fuerza. No debe haber triunfalismo, sino más unidad y trabajo de todos los colombianos contra el crimen.
