San Andrés Isla se llena de color y alegría con Sea Of Colors

Sale el sol en San Andrés Isla y en el sector de Punta Azul, donde se encuentra el emblemático sitio turístico del “hoyo soplador”, se nota la alegría y el murmullo con que los niños salen de sus casas para ver el amanecer y contagiar con su alegría a los turistas que pasean por las barreras de coral.

Después de las nueve de la mañana llegan motos, carros y buses con gran cantidad de gente que no viene a visitar el mar, ni mucho menos a tomar el famoso “coco loco”, pues con actitud de servicio y ganas arrolladoras se juntan más de cien voluntarios con los que jóvenes y adultos de diferentes partes del país y del mundo pretenden conquistar el corazón de esta comunidad y ver reflejadas sonrisas embelleciendo sus hogares y negocios, “salgan que llegaron los rotarios y los de la Fuerza Aérea que van a pintar las casas” le dice Yulieth, una habitante del sector, a sus hermanos quienes al instante sacaron sus equipos de sonido para ambientar la actividad al son de champeta y reguetón. “Está haciendo calor, vamo´ a traer el abanico y de paso la escalera para empezar a trabajar con la pintura” expresa Eder, hermano de Julieth, mientras espera a que ella traiga las camisas con los logos de la jornada para que su gente inicie a pintar.

“¡Vamos a distribuir las zonas de trabajo, y ayudemos a pintar a Colombia!” exclama Diego Daza, coordinador de la actividad Sea of Colors, quien va llamando a la gran cantidad de jóvenes que se sumaron a colaborar con la actividad, añade “les presento a la Institución que nos va ayudar a pintar los hogares y negocios que van a permitir transformar y crear tejido social”, en representación y con cara amigable les da un saludo el señor Mayor Andrés Hernández de la Fuerza Aérea Colombiana, quien con un personal perteneciente al Grupo Aéreo del Caribe ya eran conocidos en la comunidad de este sector por ser siempre parte de las iniciativas que generan cambios positivos en la Isla.

En el sector del “hoyo soplador” hay más de 250 personas que componen alrededor de 25 casas y negocios en los que se van a beneficiar con el cambio de imagen a través de la pintura, “manos a la obra” le dice el Mayor Hernández a la gente, frase con la que inicia la jornada que estaría acompañada con un sol brillante que amerita colocarse gafas y gorras al instante. El grupo de personas arma una cadena humana para pasar de manos en manos tarros de pintura, rodillos, brochas, escaleras, camisas, bandejas y baldes con agua, entre otras cosas, para avanzar en la tarea de impregnar con colores el espíritu y alegría del caribe; caminando entre las casas y viendo a la gente trabajar con entusiasmo Diego Daza cuenta “lleva 6 años este programa Sea of Colors nació en San Andrés y ahora está por toda Colombia (…) la excusa es el color que llevamos a cada uno de los rincones de la Isla, queremos que este día este lleno de color, alegría y sonrisas para toda la comunidad” complementa “gracias a todos nuestros aliados estratégicos como la Fuerza Aérea Colombiana, y todas las personas que se reúnen alrededor para ayudarnos y que esta jornada se realice del mejor modo posible”.

Los niños no paraban de jugar, “Quédate quieto hijo, ven y te enseño a pintar” dice Franklin Martínez, propietario de dos de los establecimientos que se intervinieron. Al ver con la facilidad que pintaba Franklin las paredes, los demás niños se entusiasmaron y empezaron a descargar su desborde de energía con las brochas y pinceles para ayudar a los voluntarios del evento, “una cara colorida y muy atractiva para el sector, esto impacta al turista porque va a encontrar el lugar con colores y un arte muy llamativo hacia los ojos de ellos” recalca Franklin a sus vecinos quienes también acompañan a sus hijos a pintar.

Poco a poco la fachada de las casas empezó a cambiar y pues no era de menos, habían dos muralistas, uno de Medellín conocido como Jota y Mex quien llegaba hacia poco a la Isla procedente de Argentina, “estamos haciendo un homenaje a la cultura raizal, exaltando la niñez (…) tengo una creencia y es a la vez un sueño, si todos como sociedad tuviéramos esa inocencia y el espíritu que mantienen los niños probablemente todos podríamos ser mejores personas” expresó Jota, a quienes estaban a su alrededor mientras realizaba unos trazos sobre una pared.

Transcurre la actividad y se cumple el objetivo de hacer contacto con la comunidad, cambiar la imagen al sector, mejorar la convivencia y fortalecer lazos de amistad, colaboración entre instituciones que trabajan en apoyar el desarrollo de la población isleña; “por varios años la Fuerza Aérea Colombiana ha sido un aliado estratégico para el Club Rotario, hacen parte de la mesa rotaria, el Comandante de la Institución es un rotario honorífico e históricamente siempre han sido aliados y sólo tenemos palabras de agradecimiento y en todos los eventos se involucran incondicionalmente” expresa Larry Meléndez Sánchez, presidente del Club Rotario de San Andrés Islas, en su recorrido por el sector.

Finalizada la actividad, con una vista espectacular, como en un cuadro paisajístico, se contempla la inmensidad del mar junto al arte expuesto en cada casa, acompañado de las sonrisas que plasman ese ímpetu caribeño característico, el amor se refleja en cada rincón dibujado que ratifica el sabor isleño de personas que mientras pintan, bailan. El sector del “hoyo soplador” ahora también transmite a turistas, la maravilla del colorido lugar en el que encuentran historias donde el mar y el arte se juntan para abrir camino sobre la arena y ver los atardeceres que inspiran un realismo mágico.

Es así como su Fuerza Aérea Colombiana realiza Jornadas de Apoyo al Desarrollo en un trabajo conjunto con otras entidades para mejorar la convivencia y calidad de vida en los habitantes de los diferentes sectores de la Isla.