Troya, una experiencia de integración y superación de retos
El sábado 11 de febrero 50 oficiales que se encuentran haciendo el curso de ascenso de Capitán a Mayor y de Teniente a Capitán en el Instituto Militar Aeronáutico, se dieron cita muy temprano en el Comando Aéreo de Transporte Militar (CATAM) para abordar la aeronave C-130 Hércules y emprender el viaje hasta el alma mater de la Fuerza Aérea Colombiana, la Escuela Militar de Aviación “Marco Fidel Suárez” (EMAVI), ubicada en la ciudad de Cali, con el objetivo de realizar el programa de liderazgo denominado Troya, que hace parte de su formación académica y militar.
El avión aterrizó alrededor de las 8:00 de la mañana. Los oficiales descendieron del Hércules y empezó la remembranza para cada uno de ellos, pues fue en esta escuela donde iniciaron su carrera militar; su hogar por más de dos años, compartiendo todo y apreciando con el pasar de los días, el ser parte de la Institución Aérea
Una calurosa bienvenida les dio el personal de oficiales y cadetes que integran EMAVI y quienes fueron los encargados de acompañarlos en el ejercicio de liderazgo. Ellos les expresaron que al final del día valorarían su estadía allí, su mentalidad sería otra después de vivir Troya.
Troya es un programa que se viene realizando desde 1996, se creó por iniciativa del Teniente Coronel de la Reserva Ernesto Mejía Amaya, q.e.p.d., quien fue fundador y gerente de la empresa Baterías Mac.
Desde esa época ,este ejercicio ha tenido como objetivo fortalecer los lazos de amistad,trabajo en equipo, liderazgo y la superación de temores personales. Dicha actividad es dirigida a personal que conforma la Fuerza Pública y a grupos empresariales que lo soliciten.
“Parar, Pensar, Respirar y Actuar” principio fundamental de la actividad y palabras claves que capitanes y tenientes tuvieron presentes antes de conformar los grupos y dar inicio a la aventura.
Con nombres novedosos para sus equipos y animadas porras que los identificaban, se empezó Troya.
Los retos fueron para todos los gustos: a quienes le temían a las alturas, la pizza fue el mejor remedio para vencer el miedo y la inseguridad; es un poste que tiene cerca de 20 metros de altura, consta de una base inestable, la persona está sujeta de un arnés, debe subir y ponerse de pie, decir por quién realizará el salto y brincar al vacio.
Para los descordinados, un ejercicio de rapel para tres personas, las cuales deben subir al mismo tiempo ayudados de la cuerda de seguridad que sus mismos compañeros sujetan e ir descendiendo coordinadamente. Actividades de liderazgo y trabajo en equipo como la trenza humana, la cual el grupo sin soltarse de las manos debe desatarse de un nudo que ellos mismos hacen con sus extremidades inferiores, entre otras interesantes actividades que permitieron a los oficiales sobresalir en sus habilidades y superar los temores personales.
El dìa estuvo lleno de una mezcla de sentimientos, cada uno superó sus miedos, fortalecieron la
confianza individual y grupal. Entendieron que no hay obsatáculos para cumplir satisfactoramente cualquier objetivo y más, cuando se tiene el apoyo de un equipo que alienta, da confianza y logra que los problemas se solucionen.
Este ejercicio permitió a los oficiales alumnos integrarse sin tener en cuenta el grado militar,romper barreras mentales que frenan la iniciativa para llevar acabo cualquier meta y ,sobre todo, dejó bases fuertes de liderazgo, trabajo en equipo, capacidad de escucha entre otras cualidades que sin duda alguna aplicarán en sus lugares de trabajo en cualquier especialidad. Troya terminó como una vivencia de integración y superación de retos, una excelente enseñanza que trascenderá al interior de la Fuerza Aérea Colombiana gracias a que se cuenta el mejor talento humano.