Después de dos años de labores investigativas entre unidades especializadas de la Unidad Nacional Antinarcóticos de la Fiscalía -UNAIM, el Cuerpo Técnico de Investigación Criminal -CTI, el Departamento Administrativo de Seguridad DAS, miembros de la Agencia Antidrogas DEA y el apoyo operativo de la Armada Nacional y la Fuerza Aérea Colombiana, se logró la captura de alias “Kiko”, cabecilla de una organización al servicio del narcotráfico, que tenía el control y dominio de las rutas del narcotráfico desde el Pacífico norte colombiano, hasta Panamá y Centroamérica.