Control total del incendio en los cerros podría lograrse este viernes: Distrito
El incendio forestal que consume los cerros orientales de Bogotá sigue activo. Ni las lluvias que registra Bogotá por momentos, ni los intensos trabajos de erradicación del fuego, han sido suficientes para que se controle la conflagración, que ya completa cerca de 72 horas activa.
Desde muy temprano, este jueves reiniciaron las labores de emergencia en los cerros. Helicópteros de la Fuerza Aérea Colombiana, encargados de recoger el agua en el Parque Simón Bolívar y rociarla sobre los puntos en que aún hay fuego, trabajaron conjuntamente con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, el Ejército Nacional y el Cuerpo de Bomberos de Bogotá.
No obstante, tras cuatro días de operación, 249 descargas de agua y el trabajo continuo de más de 900 personas de las entidades del Sistema Distrital, el incendio está cerca de ser extinguido. Según informe del Cuerpo de Bomberos de la ciudad, por el incendio resultaron afectadas entre 18 y 24 hectáreas de bosque fueron afectadas por este incendio.
“Luego de una suma de operaciones helicoportadas y en tierra más la afortunada presencia de lluvias sucedidas en las horas de la tarde, el incendio está prácticamente extinguido”, manifestó Richard Vargas, director del Instituto Distrital de Gestión del Riesgo (IDIGER).
Las jornadas académicas en los centros educativos del sector, y laborales en empresas, entes gubernamentales y entidades públicas, se llevaron a cabo en total normalidad. Según la Secretaría de Salud de Bogotá, no hay reporte de personas con afecciones de salud por cuenta del incendio forestal.
El IDIGER, tomando como referencia la continuidad de las altas temperaturas que se pronostican para la capital del país, indicó que trabaja en actividades de prevención de incendios. Según la entidad, tienen listo un grupo de apoyo de vigías forestales, conformado por miembros de la Defensa Civil. Este grupo estará ubicado en zonas estratégicas, y su misión es realizar avistamiento de columnas de humo en los cerros, con el objetivo de tener respuestas más efectivas.