Desbloqueo de la carretera Panamericana, la prioridad

Tras ocho días de la movilización indígena y campesina, los esfuerzos del Gobierno se centran en buscar la apertura de la vía Panamericana, cerrada entre Popayán y Cali ante la crisis generada por el desabastecimiento de elementos hospitalarios, combustibles y alzas en víveres.

En Santander de Quilichao, el ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri Valencia, y líderes del paro agrario buscaron destrabar las conversaciones, replantear la situación y establecer un acuerdo inicial con miras a la apertura de las vías y así analizar los 8 puntos del pliego de peticiones de la movilización.

Iragorri Valencia enfatizó en que desde el primer día de la movilización el Gobierno ha estado presto al diálogo y la concertación, pero que dada la situación en la capital caucana, el propósito fundamental –paralelo a continuar en la mesa de concertación– es “el desbloqueo de la vía, aunque sea humanitario, como una muestra para solucionar temporalmente la crisis que vive Popayán”.

Con acompañamiento de la Cruz Roja llegó desde Cali una caravana con oxígeno y elementos médicos para suministro de hospitales y clínicas, y por otra ruta llegaron 20.000 galones de combustible.

Iragorri Valencia insistió en la necesidad de un corredor humanitario “para poder empezar a desbloquear la discusión”. Añadió también que preocupan las personas que están sin poder pasar en sus automotores y que llevan más de cuatro días en la vía; además, que todas las actividades económicas en la zona están paralizadas.

Ante el bloqueo en al menos cuatro puntos de la vía entre Cali y Popayán, la Fuerza Aérea dispuso de un avión para crear un ‘puente aéreo’ humanitario entre las dos capitales, que sirva para el transporte de material hospitalario prioritario.

También han sido transportadas personas con urgencias médicas. Entre ellas, Pablo Emilio Pérez, quien tenía una cirugía de urgencia por un cáncer. En el mismo vuelo llegó Estefani Portocarrero, quien tras un viaje de siete días en bus desde Argentina, donde reside, se quedó inmovilizada en Popayán por el paro: “Llevaba cuatro días, de ellos tres los pasé con mis hijos en el bus, sin cómo bañarnos, sin aire acondicionado, con mala alimentación. Los niños se enfermaron”, relató.

El ‘puente aéreo’ se mantendrá hasta que se reanude el paso por la vía Panamericana; además, la empresa Satena dispuso dos vuelos diarios entre ambas capitales con una capacidad de 48 sillas por recorrido. “Los vuelos tendrán un costo de 150.000 pesos con el fin de cubrir el valor mínimo de la operación. Estos vuelos han sido concebidos con el fin de satisfacer las necesidades de abastecimientos y ayuda humanitaria entre ambas capitales”, precisó la empresa.

En Cali, los efectos se sienten en el alza de los víveres. El lunes, las amas de casa se sorprendieron con incrementos hasta del 50 por ciento en productos como la papa, cebolla cabezona y otros productos y el desabastecimiento de algunas frutas, y según algunas señoras, las que encontraron no se veían frescas.

Y en Pasto, ante la falta de combustible, la Alcaldía limitó su venta: para los vehículos de servicio público solo se venden diariamente 30.000 pesos; a los particulares, 20.000 y a los motocicletas, 10.000.

Justamente este lunes, un acuerdo entre delegados del Gobierno y comunidades permitió el desbloqueo de dos vías en el Chocó.

También se reportó que hubo acuerdo para el desbloqueo de otros puntos de Antioquia, Nariño y Risaralda.

POPAYÁN Y CALI