Don Joaquín por fin cuenta con una vivienda digna en el corregimiento de El Aro
Después de una maratónica labor para construir en tiempo récord la casa que fue transportada en helicópteros UH-60 Black Hawk del Comando Aéreo de Combate No. 5 de la Fuerza Aérea Colombiana, todo estuvo dispuesto para hacerle entrega de su vivienda a don Joaquín en el corregimiento "El Aro", en Ituango, Antioquia.
El lugar recibió el nombre “Casa del Adulto Mayor “Joaquín Emilio Echavarría”, en honor a quien logro tocar los corazones de las entidades y personas que desinteresadamente decidieron apoyar esta loable iniciativa.
El Comando Aéreo de Combate No. 5 quiso construir una casa para que Don Joaquín, a sus 85 años, viva sus últimos días de una manera más cómoda, justa y digna. Un hogar construido con la bondad, compromiso y el buen corazón de personas voluntarias que conocieron su historia y hoy han hecho este sueño realidad.
Después de una maratónica labor para construir en tiempo récord la casa que fue transportada en helicópteros UH-60 Black Hawk del Comando Aéreo de Combate No. 5 de la Fuerza Aérea Colombiana, todo estuvo dispuesto para hacerle entrega de su vivienda a don Joaquín en el corregimiento "El Aro", en Ituango, Antioquia.
El lugar recibió el nombre “Casa del Adulto Mayor “Joaquín Emilio Echavarría”, en honor a quien logro tocar los corazones de las entidades y personas que desinteresadamente decidieron apoyar esta loable iniciativa.
El Comando Aéreo de Combate No. 5 quiso construir una casa para que Don Joaquín, a sus 85 años, viva sus últimos días de una manera más cómoda, justa y digna. Un hogar construido con la bondad, compromiso y el buen corazón de personas voluntarias que conocieron su historia y hoy han hecho este sueño realidad.
Para Don Joaquín tener una vivienda digna era ya solo un lejano deseo, había pasado casi toda su vida en un estado de profunda soledad acompañado de un fiel amigo; su bastón.
Este año tendrá una Navidad diferente; uno de sus grandes anhelos se ha cumplido gracias a la voluntad y solidaridad de quienes decidieron brindar una ayuda de manera desinteresada, que llegó del cielo en los ángeles de acero de la Fuerza Aérea Colombiana.
Para Don Joaquín tener una vivienda digna era ya solo un lejano deseo, había pasado casi toda su vida en un estado de profunda soledad acompañado de un fiel amigo; su bastón.
Este año tendrá una Navidad diferente; uno de sus grandes anhelos se ha cumplido gracias a la voluntad y solidaridad de quienes decidieron brindar una ayuda de manera desinteresada, que llegó del cielo en los ángeles de acero de la Fuerza Aérea Colombiana.