Comunidades del Oriente colombiano finalizaron capacitación en Quindío gracias a su Fuerza Aérea Colombiana
En un hito significativo en el desarrollo del turismo rural sostenible en Colombia, ciudadanos del Oriente del país lograron atravesar por primera vez más de 860 kilómetros en dos horas de viaje, para estudiar y completar con éxito el Diplomado de Turismo Rural Sostenible, gracias a tripulaciones y aeronaves de su Fuerza Aérea Colombiana.
Con el fin de apoyar una oportunidad transformadora para las comunidades alejadas del país, su Fuerza Aérea Colombiana en una misión para superar las barreras geográficas y permitir el acceso a la educación, dispuso sus aeronaves e hizo posible el traslado de 55 habitantes desde las remotas regiones del Vichada y Guainía hasta Armenia, Quindío, donde lograron obtener conocimientos y herramientas necesarias para fortalecer el potencial turístico de las regiones más apartadas. Este gesto no solo representa un viaje físico, sino también un viaje de esperanza y oportunidad para aquellos que luchan contra las limitaciones impuestas por la distancia y el aislamiento.
Durante 30 días intensivos, los graduandos fueron parte de una experiencia de aprendizaje innovadora, donde la metodología del "Aprender Haciendo" les permitió adquirir habilidades prácticas y compartir conocimientos desde la diversidad de sus experiencias.
El resultado de este trabajo interinstitucional del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo a través del Fondo Nacional de Turismo, Fontur, en alianza con la Fundación Panaca y su Fuerza Aérea Colombiana es evidente, pues por primera vez 28 representantes del Vichada y 27 del Guainía, lograron participar de esta convocatoria y se graduaron exitosamente.
Este logro no solo demuestra el compromiso de estas instituciones con el desarrollo de las comunidades, sino también el impacto positivo que la Fuerza Aérea Colombiana puede tener al facilitar el acceso a oportunidades educativas y de capacitación, impulsando la economía y fortaleciendo el tejido social de las comunidades más vulnerables, pues estos graduandos no solo regresan a sus hogares con nuevos conocimientos y habilidades, sino también con una renovada esperanza en un futuro mejor para ellos y sus familias.