Constructores de Sueños
En el Comando Aéreo de Mantenimiento unidad con 95 años de historia y cuna de la logística aeronáutica se encuentran Oficiales, Suboficiales y Civiles con un gran sentido de pertenencia a la Institución; entre ellos los hermanos Ramírez Barreto.
Toño y Omar como son conocidos, llevan trabajando en la Institución más de 25 años, en los cuales han ayudado a construir su historia; pues ellos trabajan en el área de albañilería del Grupo de Apoyo del Comando Aéreo de Mantenimiento y desde su niñez han tenido un contacto directo con la Fuerza Aérea Colombiana.
“Cuando éramos niños veníamos a que nos dieran algo de comer” recuerda Toño con un rostro de nostalgia, porque desde pequeños se criaron solo con su padre y sus hermanos, siendo para ellos la Institución un medio de sustento, teniendo en cuenta que en su niñez la pobreza fue bastante notoria.
A los 14 años de edad de Omar y 16 años de Toño iniciaron sus trabajos como ayudantes de construcción con contratistas que ejecutaban obras en la unidad, entre las cuales se destacan hoy en día el hangar PDM, los casinos, las barracas, el Grupo de Educación Aeronáutica que sus instalaciones anteriormente eran usada por el Fondo Rotatorio y la Torre de Control, esta última fue demolida y “Toñito” como también es conocido, recordó un experiencia que marcó toda su vida.
Pues Toñito recuerda que mientras ayudaba a la demolición de la antigua torre de control observó hacia el horizonte un objeto no identificado – OVNI - , que para él era algo extraordinario que sucedió en un tan solo par de segundos.
Eran tantas las ganas de trabajar con la Fuerza Aérea Colombiana que los hermanos Ramírez no desfallecían y buscaban cualquier trabajo con contratistas para nos desvincularse; hasta que en 1995 a sus 33 años Omar Ramírez logró ingresar como maestro de obra de la unidad, para realizar la construcción del edificio de Oficiales casados que hoy día sigue en pie.
Al estar nombrado, Omar cumplió uno de sus grandes sueños: terminar su bachillerato; el cual lo logró estudiando en horario nocturno en el colegio Gabriel Echavarría que tenía convenio con el Comando Aéreo de Mantenimiento, destacándose como uno de los mejores ICFES del municipio de Madrid; reconocimiento que fue otorgado mediante un diploma por el Alcalde de esa época.
Pero su ambición de aprender y capacitarse continuaba, ya que tuvo la oportunidad de seguir estudiando en horario nocturno con el Servicio Nacional de Aprendizaje SENA y culminar sus estudios como Técnico Profesional de Construcción y reconoce que gracias a la Fuerza Aérea sus hijos escalonaron el sueño de ser profesional.
Por otra parte, Toño ingresó a la unidad el 1997 como jardinero desempeñándose en este cargo por cinco meses y posteriormente estudió en horario nocturno con la Empresa Colcerámica, obteniendo un título de Técnico Enchapador en Porcelana Sanitaria, lo cual permitió reforzar el grupo de construcción de albañilería del Grupo de Apoyo del Comando Aéreo de Mantenimiento.
A partir de ese momento los hermanos Ramírez han realizado obras representativas y remodelaciones de la unidad, destacándose por su compromiso, responsabilidad y amor a la Institución; tanto así, como conseguir gratuitamente recebo para la vía perimetral y adecuarla con sus propias manos para lograr un trayecto útil que permitió el paso peatonal y vehicular.
Son muchas obras que han forjado las manos y conocimiento de los hermanos Ramírez, quien visita la unidad sabe la huella que han dejado estos hombres madrileños, es así como en el año 2005 el señor Técnico Jefe de Comando Silva que se encontraba en esa época, hizo entrega de un monumento abandonado para que fuera remodelado y lo denomino la “mano trabajadora” que hace referencia al trabajo arduo y constante que realiza el personal civil de la unidad, entre ellos Antonio y Omar Ramírez quienes dejaron impresos sus nombres en este importante reconocimiento.
Falta poco para que los hermanos Ramírez dejen de trabajar ya que terminaran su ciclo en esta base aérea que edificaron hace más de 25 años, pero seguirán con sus proyectos; para Omar uno de ellos es seguir reconstruyendo su casa y para Toño disfrutar del fruto de su trabajo al lado de su esposa e hija con discapacidad.
Pero ambos tienen en común que al salir de la Institución se van con la satisfacción del deber cumplido y de haber contribuido a la construcción de sueños de quien pisan el Comando Aéreo de Mantenimiento.